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SEGURO DECESOS IMPUESTO SUCESIONES

SEGURO DECESOS IMPUESTO SUCESIONES

El seguro de decesos no sólo se presenta como una gestión útil a la hora de cubrir los gastos que suponga el sepelio y la tramitación de los aspectos burocráticos sino también a la hora de hacer frente al impuesto de sucesiones.

Tras el fallecimiento de un familiar se lleva a cabo un inventario con todos los bienes que poseía el fallecido, tanto los bienes pasivos como los bienes activos. Al hablar de bienes activos hacemos referencia a aquellos bienes que la persona fallecida poseía en el banco, propiedades inmobiliarias o cualquier otra posesión material o financiera. Por su parte, los bienes financieros pasivos se refieren a aquellas deudas que el difunto pudiera tener como por ejemplo préstamos.

Las herencias de bienes y capital están sujetas al impuesto de sucesiones que paga la persona que ve incrementado su patrimonio por el legado de una persona fallecida. Cuando el difunto tiene contratado un seguro de decesos, surgen dudas habituales sobre tributación del valor de esta póliza. Para entender las diferentes situaciones, es preciso contar con toda la información y legislación que entra en juego, te resumimos a continuación todas las posibilidades para ayudarte.

El seguro de decesos influye en el impuesto de sucesiones o más concretamente en los herederos de una persona fallecida de dos formas. Por una parte, es un capital que puede pasar a formar parte de la herencia que se recibe en determinadas situaciones y por otra, se convierte en una herramienta económica para ahorrar gastos a los herederos, lo que se traduce en que la herencia es mayor.

En los seguros de decesos el capital previsto se define en servicios concretos relacionados directamente con el fallecimiento del titular: pago del sepelio, servicios de tanatorio, transporte, asistencia psicológica… Hay un largo catálogo de asistencias que el titular elige e incluye en este tipo de decesos.

El objetivo de la cuantía económica que se garantiza en un seguro de decesos es cubrir todo lo previsto. Se gasta pagando todas las facturas derivadas de la muerte del titular y en servicios administrativos y de gestión para que herederos, amigos y/o familiares no tengan que afrontar en tan triste situación este tipo de labores y desembolsos económicos.

Dado que el capital del seguro de decesos se gasta, no forma parte de la herencia del fallecido. Como norma general, no se incluye en el inventario de bienes puesto que en el momento de la herencia ya no existe.

Salvo en el caso en el que, por diferentes causas, efectivamente este capital no se use – o exceda las necesidades- y en su lugar, la compañía contemple la posibilidad de convertir en una indemnización para los herederos el total o parte del capital protegido en esta póliza. En este escenario que no es el más habitual, pero que puede darse el seguro de decesos o mejor dicho la indemnización prevista, sí pasaría a formar parte de la herencia y como tal debería tenerse en cuenta al calcular el impuesto de sucesiones, estaría sujeto a tributación.

Los seguros de decesos pueden ser útiles para hacerse cargo del Impuesto de Sucesiones. Todos aquellos gastos que se deriven del fallecimiento serán considerados como parte de la herencia. Mediante los seguros de decesos se evita que la herencia se vea afectada por los gastos del sepelio, así como, de aquellos gastos que suponen los trámites burocráticos.

Los importes del seguro de decesos, que se utilizan para abonar gastos del fallecimiento del asegurado, no se consideran rendimiento, y por tanto no tributan en el IRPF. Como contrapartida, tampoco se pueden incluir para su desgravación.

Aquí hay matices, pues se pueden dar dos circunstancias. Si los gastos previstos en el seguro de decesos se consumen en su totalidad no habrá que tenerlos en cuenta en el Impuestos de Sucesiones, y no tributarán entonces.

Sin embargo, se puede dar el caso de que los gastos sean inferiores a la cobertura económica que otorgaba el seguro de decesos. En estos casos, la aseguradora está obligada a devolver los importes no gastados por los herederos. Dicha cantidad consta como herencia y, por tanto, sí se incluirá dentro de la base imponible sobre la que tributar en el Impuesto de Sucesiones.

Los seguros de ahorro si pueden utilizarse para desgravar, o, pueden ofrecer algún tipo de beneficio fiscal al asegurado. Esta tributación es diferente en función del tipo de seguro:

  • Los PPA permiten la deducción de las aportaciones con un máximo de 8000 € anuales.
  • Los PIAS no pueden utilizarse para desgravar, sin embargo, en el momento del rescate, si el plan tiene más de cinco años y se rescata en forma de renta vitalicia el capital obtenido en el rendimiento no tributa

La cobertura adicional seguro de vida en seguros de decesos es de gran ayuda a la hora del pago del impuesto de sucesiones ya que será la encargada de proporcionarnos una liquidez adicional. De esta manera aquel dinero que se recibe como consecuencia de tener contratada esta cobertura adicional podrá ser utilizado para hacer frente a aquellos gastos que deriven del impuesto de sucesiones.

En definitiva, es conveniente estudiar bien nuestro caso a la hora de contratar una póliza de seguros, ya que una cobertura adicional puede hacer frente a posibles gastos que supongan el fallecimiento de un familiar. Como consecuencia de esto las compañías aseguradoras buscan siempre dar a sus clientes la cobertura más precisa para cubrir lo que ellos necesitan.

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